El símbolo del fuego ha sido siempre el elemento protagonista de las celebraciones mallorquinas. Tanto para la población pagana como para la cristiana, el fuego forma parte de sus rituales y tradiciones; además de considerarse como fertilizante para la tierra.
Como consecuencia del estudio textil, nace el balancín colgante hecho en madera de nogal. Este producto es capaz de utilizar la medida exacta del textil y usarla a su favor para obtener el máximo de eficiencia. Las lenguas mallorquinas salen de fabrica con una amplitud de 70cm de ancho y el balancín ofrece esa medida exacta. El diseño esta pensado para que la tela vaya de un punto a otro sin necesidad de costuras ni cortes, haciendo que su proceso/ejecución sea más sostenible. Una única pieza de tejido conforma el asiento, el cojín y los espacios necesarios para fijarlo a la estructura de madera de nogal.